23 de marzo de 2018

Primavera 2018

Tenemos por delante una primavera que no se volverá a repetir. No coincidiremos con las mismas personas, no plantearemos las mismas preguntas, ni obtendremos muchas respuestas. Por mucho que insistas en repetir el mismo día que el anterior, las probabilidades correrían en tu contra y pese a que te encuentres a las mismas personas las variables serán constantes. A eso, vamos a añadirle que no estaremos con la misma atención continua y olvidaremos gran parte de lo que pase en un día. Así, la próxima vez que te pregunten que tal todo y respondas: "Siempre lo mismo o siempre igual" simplemente es que no quieres entrar en detalles.
Voy a ausentarme esta semana entrante, me apetece desconectar para arreglar mi casa de dentro ( la que soy) para limpiar el alma y prepararla para lo que viene a continuación, para pedir al corazón que lata más despacio, que respire más profundo, que serene. Hay un tiempo para renovar la esperanza, en lo bueno que viene por delante, porque queremos y porque merecemos. Hay un tiempo para pedir a la vida que nos enseñe a no perder el norte, a tener siempre amor, a tener siempre un pensamiento optimista, a percibir que ese tiempo es [siempre] ahora. 



16 de marzo de 2018

¿Qué nos queda?

Cuando no conseguimos cambiar lo que nos rodea, nos queda cambiarnos a nosotros. No dejar: que el ruido del mundo atraiga nuestra razón positiva, no dejar que la duda se instale, insidiosa, capaz de minar toda esperanza y energía. Esa luz de la que siempre te hablo...

Acabamos siempre por entender que no todos van a aceptar (y respetar) todo lo que somos, todo lo que decimos, y, sobre todo, todo aquello que callamos. Acabamos siempre por entender (y, muchas veces, sólo más tarde aceptar) que no todas las personas nos gustará. y eso es tan fácil de entender cuando llegamos a saber (y a lamentar) que esas mismas personas no les guste mucho ni de ellas mismas.
Esta semana ha sido de emociones fuertes, y ahora en la calma, inspirando y expirando para que lo bueno entre y salga lo malo...Termino con una frase de Yann Martel:
En la vida, hay que concluir las cosas debidamente. Sólo entonces puedes soltarlas. Si no, te quedas con palabras que deberías haber dicho y que no dijiste, y el corazón se te llena de remordimiento
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